Cada disciplina tiene sus expertos. Si es experto en la vida, un biólogo. Si es experto en lenguajes, un filólogo, etc. Si es experto en temas de Dios y religiosos, un teólogo. Y estos últimos han sido especialistas en filosofar por siglos acerca de qué es Dios y qué quiere. Y de paso deducir y explicar sus atributos. Algunos de los más conocidos son los OMNI.
La teología indica que Dios tiene varios atributos "omni": Dios es omipresente (está en todas partes), es ominciente (lo sabe todo) y es omnipotente (tiene todo poder concebible), entre muchos otros omni (también se le adjudica ser onmimisericorde, "todo misericordioso", todo amoroso, etc.).
Sin embargo, después de la fanfarria inicial de declarar que Dios tiene tales atributos, los teólogos han estado omni-aproblemados, y han tenido que gastar ríos de tinta para "justificarlos", pues muchos de estos atributos
se contradicen entre sí o contradicen lo que sus propias escrituras judeocristianas establecen. Por ejemplo Dios colocando un producto "peligroso" en su jardín del Edén sin saber qué iba a pasar, o cuando estaba pasando, a pesar de que esta (supuestamente) en todas partes, sin tener idea del problema entre manos.
Pero los problemas son más malos cuando se mira el mundo de hoy. Si Dios está en "todas partes" y o "sabe todo", tal Dios sabe cuando una cosa mala le sucede a una persona, y más atención requeriría de su parte si ese alguien es un creyente que está rogando por "su" ayuda. Y así vemos sin embargo que muchas personas son víctimas de todo tipo de desastres naturales o de violencia y abuso de otros humanos, sin que tal Dios haga nada por proteger o auxiliar a las víctimas.
Lo anterior es aún peor si consideramos los casos donde el victimario es alguien ligado a una iglesia o, peor, directamente un líder de una iglesia (sacerdote, pastor, obispo). ¿Qué ha hecho la divinidad para proteger a las víctimas, o detener a los agresores y prevenir futuras víctimas? Vemos que absolutamente nada, pues los agresores muchas veces han vivido en absoluta impunidad, poder y prestigio, y si más que tarde han caído o han sido expuestos ha sido sólo por el clamor de las víctimas ante la justicia y sociedad humanas, pues la contraparte divina brilla por su ausencia....
Pero el poder omni más penoso, he llegado a concluir, es el de la omnipotencia. Dios tiene "todos los poderes", y así se ha declarado pues los creyentes atribuyen a Dios la existencia de todo el universo, por lo que su poder debe ser inmenso. Y según el Antiguo Testamento, el poder divino era aterrador: era capaz de crear columnas de fuego, partir océanos, hacer caer comida del cielo y todo tipo de hechos imposibles (según el mito del Éxodo). Pero, claro, esas son historias de eventos de hace decenas de siglos, ¿cómo se manifiesta el omni de Dios hoy?
Resulta que para ver a Dios "en acción", hay que preguntarse ¿cuántas cosas los líderes religiosos hacen y piden hacer a sus feligreses "en el nombre de Dios". Y con ello, cuantas de esas cosas son efectivamente hechas por las personas. Y contrastar cuántas de esas podrían ser hechas directamente por Dios, como muestra de poder y presencia. Veamos:
Dios podría financiar a su iglesia.
¿Construir templos? ¿Pagar cuentas de electricidad, agua y gastos? ¿Los vehículos que los pastores y líderes necesitan? ¿Sus viajes? ¿Sus fastuosas propiedades para disfrute personal? ¿Sus caras ropas? Todo eso Dios podría financiarlo, o proveerlo directamente.
¿La realidad? Cada centavo es cuidadosamente ordeñado del ganado creyente, vía diezmo, via donación, via trabajo gratuito voluntario. Si los humanos-ganado dejaran de financiar la religión, la religión moría de inanición.
Lo curioso es que Dios es incapaz de hacer nada físico si no es hecho "en su nombre" por un humano (creyente o no), o porque ocurre como parte del mundo natural. Si se descarta la intervención humana y las ocurrencias naturales, la actividad de Dios se reduce a cero.
Dios podría sanar a sus creyentes
¿Cáncer? ¿Enfermedades terminales? ¿Dolores? ¿Cuentas de hospital millonarias que son imposibles de pagar? Para un Dios omnipotente, sanar a ese humano sería pan comido (considerando que en teoría Jesús fue capaz de incluso revivir muertos; sanar tejido aún vivo es trivial en comparación).
Sin embargo vemos que los creyentes enferman en la misma proporción que los no-creyentes, y tienen que recurrir a la medicina humana tal como cualquier otro. Claro, cuando un creyente pasa por una enfermedad grave y sana (bonus si es supuestamente una enfermedad incurable o fue desahuciado por los expertos médicos), la comunidad creyente asume automáticamente ¡un milagro! O que fue la voluntad divina la que actuó para permitir la curación. Sin embargo se sabe que el cuerpo humano en ocasiones puede responder en formas inesperadas ante las enfermedades y el daño orgánico, y recuperarse aún cuando nadie ni siquiera científicamente lo espera. Y tales "sanaciones" ocurren en todas partes, sin que ocurran ni en más cantidad ni en forma más "espectacular". Pero no vemos eso, solo se ve que las cosas pasan tal y como se esperan en un mundo natural...
Dios podría hacer verdaderos milagros
La omnipotencia de Dios se supone su capacidad de hacer "cualquier cosa" que él desee, si es que lo desea. Sin embargo, cuando vemos los milagros que hoy sus creyentes declaran que son "obra de Dios" (como en el caso de sanaciones), todas ellas ocurren dentro del marco de cosas que se saben posibles en el mundo natural. Sabemos que es posible que hasta las enfermedades más graves se curen a veces en forma "espontánea", y de vez en cuando ocurre. Si le ocurre a un creyente ës un "milagro de Dios". Pero las cosas imposibles en el mundo natural jamás ocurren ni siquiera por milagro. Ni siquiera Dios, supuestamente todopoderoso, puede hacer algo ahí.
Por ejemplo, Dios supuestamente cura todo tipo de cosas, pero
¿porqué Dios no sana a los amputados? El poder de Dios sin duda sería capaz de hacer creer un nuevo miembro a quien no nació con uno o que lo perdió en forma accidental o por enfermedades durante su vida. Pero sabemos que eso no ocurre en forma natural, ni siquiera en forma excepcional. Y, curiosamente, el poder divino tampoco es capaz de hacer tal cosa. Sospechoso...
Dios podría detener desastres o accidentes en plena acción. No que cuando cae un avión u ocurre un accidente, algún creyente sobreviva "en forma milagrosa", siendo uno de pocos sobreviviente entre decenas o cientos de víctimas fatales. Sino que cuando el avión falla y va cayendo hacia el desastre aparentemente inevitable, una mano (visible o invisible) sea capaz de frenar el avión en el aire y depositarlo suavemente en tierra sin ninguna víctima. No, eso nunca ocurre en forma natural, ni siquiera en forma poco frecuente. Y Dios tampoco es capaz de hacerlo, aún si fuera un avión lleno de creyentes clamando por su vida mientras el avión cae.
Lo que vemos es que cada vez que ocurre un (declarado) milagro, tal milagro es algo que es muy poco probable que ocurra en el mundo natural. Ridículamente improbable, pero que se sabe que aunque sea uno en millones, puede ocurrir. Y como puede ocurrir, de vez en cuando ocurre. Con o sin petición a ningún dios, a creyentes y no creyentes por igual. Pero cuando el evento milagroso que se espera se sabe imposible en el mundo natural, tal milagro jamás ocurre tampoco para ningún creyente, pues aparentemente Dios es incapaz de producir algo que sea distinto a lo natural.
Racionalizaciones
Sin duda que cualquier creyente que haya llegado a este punto tendrá muy probablemente en mente una serie de respuestas y objeciones a este planteamiento. Es bienvenido a plasmarlos como un comentario. Desde "yo sé que vi/viví un milagro porque sané" (testimonio anecdótico, pero de algo poco frecuente que ocurre sin intervención divina alguna, punto tres), a todo tipo de excusas de porqué Dios, pudiendo hacer ese tipo de "milagros" no los hace porque "no es su voluntad", "no es parte de su plan", no lo hace para no "revelar su existencia", o que "Dios no debe ser puesto a prueba", etc. Cada una de esas explicaciones son una racionalización, pues superficialmente parece resolver los problemas mencionados, pero cuando se analizan en detalle, no se sostienen.
Por ejemplo, la idea de que Dios hace ciertos tipos de milagros pero algunos simplemente no le gusta hacerlo o no está "en su plan" se contradice con lo que la Biblia registra a Jesús en
Juan 14:12-14:
"De cierto, de cierto os digo: El que en mí cree, las obras que yo hago, él las hará también; y aun mayores hará, porque yo voy al Padre. Y todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, lo haré, para que el Padre sea glorificado en el Hijo. Si algo pidiereis en mi nombre, yo lo haré."
Entonces, el único requisito para obtener un verdadero milagro es que alguien de verdad sea creyente y pida algo "en nombre de Jesús" y eso con seguridad ocurrirá, pues se ve que no hay condiciones extras en esas palabras. No hay condiciones: no hay un "si es que yo o Dios está de acuerdo", o "si es de acuerdo a la voluntad divina". Nada de eso, dice literalmente "todo lo que un creyente pida en el nombre de Jesús".
Entonces deberíamos ver que realmente todo tipo de "milagros" ocurren. No solo cosas poco frecuentes que sí ocurren en el mundo natural. Pero no vemos que tales cosas, milagros "anti-naturales" realmente ocurran. Si no ocurren, entonces la conclusión inevitable es que tales palabras tienen serios problemas, y alguna de las siguientes cosas ocurren:
- No existen verdaderos creyentes el día de hoy.
- Sí existen verdaderos creyentes, pero ninguno de ellos es lo suficientemente caritativo y misericordioso para pedir algo por alguien que sufre, como que un amputado se recupere, o que el hambre en el mundo desaparezca.
- O Jesús dijo eso y mintió, por lo que aunque un verdadero creyente pida algo en el nombre de Jesús, nada ocurre.
- O Jesús dijo alguna otra cosa pero dichos como esos registrados en la Biblia es mentira, nunca ocurrieron, y es obra de hombres posteriores que inventaron tales dichos.
O tal vez la explicación es mucho más simple y parsimoniosa. El fallo de el omni de omnipotencia, así como los otros omni, la completa impotencia de Dios de no hacer absolutamente nada si no es un humano haciéndolo "en su nombre", y la completa incapacidad de Dios de hacer verdaderos "milagros", no solo hacer que cosas poco probables ocurran, pueden tener una explicación muy simple: Dios no existe.
Para considerar.